Definitivamente hoy soy blanco y negro. Con wide screen y arañazos y suciedad de esas que aparecen en los celuloides viejos. De vez en vez salta un cuadro de la película usada en el film de mi vida. A veces se me va el sonido. Otras se cortan algunos frames y aparezco ya en otro lado.
Grande y y divísima a lo Gloria Swanson en Sunset Boulevard.
Sí, hoy soy blanco y negro. Con sombra de ojos color humo, el pelo encairelado y los labios carmín. Con estola, boquilla para mi cigarro y tacón de aguja.
Mañana tal vez seré polaroid de ordinaria locura. Hoy, soy orgullosamente bitonal.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
6 comentarios:
Lo bueno de las fotos y de las películas en blanco y negro es que la gente sale siempre bien. Como más pura... será que los días nublados me encantan y el sol excesivo me deprime, será que soy medio bicho raro... pero creo que ser blanco y negro cada tanto es algo muy saludable.
:)
Besos en sepia.
Gracias Astilla por pasar!!!, sos bienvenida cuando quieras, las puertas están abiertas, sólo entra sin tocar...
La vida también necesita de ese blanco y negro, para que los matices sean las sombras... quizás hasta de eso se trate, de que no sea todo de colores.
En fin... estuve chusmeando tu blog y me encantó... me vas a tener seguido por estos lares...
Besotes impares y sin sal!
bitono y con gafas negras, para pasar de todo, glamorosamente. a veces sucede y ¡qué delicia!
lo has descripto maravillosamente, astilla.
más abrazos
Gracias por revelarte, aunque no me pareces nada negativa
Te das cuenta la gama de grises que intervienen...
Estarás muy guapa con los labios rojos.
Un beso, Tocaya
Pero y lo maravilloso que es esa magia que destilan las películas como describes. Envolverse de esa magia perenne vale más que mucho color perecedero.
Un saludo
Publicar un comentario