Creo que voy mejorando. Las letras se me ocurren camino al trabajo, en la regadera, mientras lavo platos. Llegan poco a poco. Ideas de palabras. Fantasmas de historias o razones que valen la pena escribir. Nada se ha escrito aún. Nada.
Pero el camino ahí está. Y mis letras. Y mi entusiasmo por creer que este patético conato de genialidad es en realidad un avance.
viernes, julio 13, 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
-
Enhorabuena...
Saludos...
-
Publicar un comentario